Lo que comúnmente se conoce como prueba del oído es una prueba por la detección precoz de la hipoacusia o sordera, que es una deficiencia debida a la pérdida o alteración de la función del sistema auditivo.
Su detección precoz se realiza mediante un cribado neonatal, a través de una prueba que se llama potenciales evocados auditivos automatizados. Esta prueba detecta la pérdida auditiva o la hipoacusia moderada, intensa o profunda.
Es una prueba que se realiza durante la estancia hospitalaria y su resultado se notifica inmediatamente después de realizarla. La prueba es muy sencilla y nada dolorosa para el bebé. Es importante que el bebé esté durmiendo mientras se lleva a cabo y en un espacio lo más tranquilo y silencioso posible.
¿Qué significan los resultados?